A sólo veinte kilómetros al sur de la Ciudad de Gracias en el Departamento de Lempira, en una de las regiones mas hermosas de Honduras se encuentra una de las ciudades más hermosas y antiguas. Es como magia para los ojos de los visitantes poder ver este pequeno pueblo en medio de cañones y bosques de pinos el cual cuenta con algunos de los edificios coloniales mejor conservados en Honduras.
La mayoría de los habitantes de La Campa son de descendencia Lenca quienes aún conservan el estilo de vida tradicional.
La Campa es bien conocido por su magnífica producción de alfarería Lenca. Gran parte de la producción de cerámica proviene de las aldeas de los alrededores, donde los habitantes son expertos en la fabricacion de alfareria en el estilo tradicional Lenca.
La Campa es bien conocido por su magnífica producción de alfarería Lenca. Gran parte de la producción de cerámica proviene de las aldeas de los alrededores, donde los habitantes son expertos en la fabricacion de alfareria en el estilo tradicional Lenca.
La Campa fue originalmente un pueblo Lenca conocido como Tecauxinas. Se convirtió en municipio en 1921. El nombre de La Campa deriva de una expresión usada por los mineros para referirce al lugar para acampar y protegerse de la lluvia.
El clima de La Campa es fresco la mayor parte del año y es el lugar perfecto para relajarse y olvidarse de los ruinos de la vida moderna.
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